Nudo



Inicio. Punto.
Uno, dos. Unidos.
No dos. Nudos.

Tejido único, un texto, una textura.
Relaciones, conexiones mentales, espirituales.
Energía. Cada persona, un hilo, una fibra que se liga a las demás.
Sin inconsciencia, hay una trama invisible que religa.

Las tramas se abren, los hilos se separan. Más separados, más próximos.
Más anudados, ligados. Entrelazados, lazos. Entretejidos, tejidos.

Unidos.
Dos no, uno.

El tejido se daña.
Daño se hace.
La trama se abre.
Un hilo puede cortarse, puede romperse.
Deslizarse, jalarse.

Dile algo a una persona, se lo dirás a todo el mundo.
Una persona te habla, escuchas a todas.
Esa persona, el mundo, se lleva lo que dices, lo que haces.
Siente y sentirás al mundo.

Silenciado con el mundo, silenciamos, anestesiados, silencio.

Un vínculo es un nudo invisible dentro de las personas.
El nudo no es quietud, es un remolino, un etrecruzarse de los hilos.
Ese vínculo puede desanudarse, desnudarse. Puede desvestirse.
Pero no dividirse, partirse.

¿Qué estás tramando?
Dividir es cortar el hilo, romperlo, y con él la trama completa, el tejido del mundo.
Una red siempre, un tejido que atrapa.
Tejido con hilos finos, muy frágiles, pero tejido en fin.

Julián Bernatene